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La persona que acompaña en el parto

A medida que se acerca la fecha probable de parto, es esperable que la mujer empiece a presentar temores relacionados al mismo. Algunas expresiones más frecuentes son el miedo al dolor, las dudas sobre la capacidad de dar a luz, miedo a que el trabajo de parto sea muy largo y de que las contracciones sean muy largas y dolorosas, y el miedo al estado de su propia salud y a la de su bebé.

Es por ello que el poder contar con alguien que esté a su lado durante el proceso del parto para poder brindarle apoyo emocional, tranquilidad, confianza, seguridad y afecto, es muy beneficioso para ella y para el bebé.

Durante el momento del parto, la mujer puede experimentar:

-Excitación.

-Ansiedad.

-Miedo.

-Cansancio.

-Dolor.

-Puede sentir inseguridad.

-Miedo a lo desconocido (si es su primera experiencia).

-Miedo a volver a pasar por un parto traumático (si es que lo tuvo anteriormente).

-Incertidumbre, porque no sabe si el proceso se desarrollará dentro de lo «normal» o lo esperado, o si surgirá algún inconveniente.

Recomendaciones de la OMS

La Organización Mundial de la Salud (OMS), para los cuidados durante el trabajo de parto para una experiencia de parto positiva, recomienda en primer lugar la atención respetuosa de la maternidad, de manera que mantenga su dignidad, privacidad y confidencialidad, que asegure la integridad física y el trato adecuado y que permita tomar una decisión informada y recibir apoyo continuo durante el trabajo de parto y el parto.

También se recomienda el acompañamiento de la mujer por una persona de su elección, durante el trabajo de parto y el parto. La persona de apoyo debería ser alguien de confianza de la embarazada. Si la presencia del padre del bebé no fuera posible, puede acompañar la madre, la hermana, alguna amiga, o quien la embarazada prefiera.

¿Por qué es importante estar acompañada durante el parto?

Estudios e investigaciones analizaron las ventajas del acompañamiento durante el parto, y refieren principalmente las siguientes:

1. Reduce la duración del trabajo de parto, debido a que la presencia de su pareja u otro acompañante le brinda calma y tranquilidad.

2. Hay más probabilidades de tener un parto normal sin analgésicos o intervenciones médicas, ya que el apoyo mejoraría la sensación de control de la madre, reduciendo la necesidad de la utilización de intervenciones instrumentalizadas.

3. Se puede presentar una mayor satisfacción y una mejor experiencia del parto.

4. En los partos instrumentalizados (cesáreas), la madre se siente más vulnerable ante un parto que no se desarrolla en forma natural, y se ve más necesitada del apoyo que le puede proporcionar su acompañante.

5. En caso de que la madre luego del parto por algún motivo médico no pueda realizar el contacto “piel con piel” con su bebé, el padre o la persona que acompaña puede realizar esta técnica brindando muchos beneficios al recién nacido.

¿Cómo puede apoyar el acompañante?

Investigaciones revelan que el hecho de tener al lado a alguien conocido y de confianza durante el parto, ya es un apoyo importante para las mujeres durante el parto.

Pero además de la compañía, la persona elegida puede realizar las siguientes tareas para que la experiencia del parto sea más satisfactoria:

-Tranquilizar, animar y calmar a la mujer, mantener el contacto físico.

-Cronometrar el intervalo de las contracciones durante el periodo de dilatación.

-Conocer las técnicas de respiración y relajación para ayudar a realizarlas durante las distintas fases del parto.

-Realizarle masajes en la cintura y espalda para aliviar dolores. Refrescarle el cuerpo y la cara con una toalla húmeda.

-Entretenerla y distraerla para que no se le haga tan largo el parto.

-Estar atenta a sus necesidades como el frío o calor, la sed y el hambre, o la de llamar a las enfermeras o médicos cuando la mujer lo requiera.

También es importante que la persona que acompañe el parto pueda asistir con la embarazada a charlas o cursos de preparación para el parto, para conocer las etapas del mismo, aprender las técnicas de realización de todo lo anteriormente descrito.

Para poder ser realmente de ayuda, la persona que acompaña debe conservar la calma, tener mucha paciencia, darle ánimo y bajo ningún motivo discutir u ofenderse por algo que pudiera decirle la mujer en trabajo de parto. Si es la persona elegida, es porque le tiene confianza y le necesita cerca en uno de los momentos más importantes de su vida, de su bebé, y seguro que también se convertirá en uno muy importante en la suya.